Al sureste de Peña Ubiña y separado de "La Peña" por el alto de cerreos se levanta un pequeño pico llamado Peña Cerreos.
Debido a la vecindad de las dos ubiñas, siempre ha quedado en segundo plano, pero desde aquí, quiero recordarlo, y deciros que merece la pena su ascensión.
En su cumbre, todavía se pueden observar restos de las posiciones construidas en la Guerra Civil, como las que os muestro en estas fotos.
Sólo de pensar en pasar un invierno aquí arriba, se me ponen los pelos de punta. Sobre todo si pensamos en el "equipo" de entonces, unas mantas y poco más.
Y por último, esta otra foto en la que, si no fuera por la nieba, desde esta posición se vería el collado de Cerreos.
Hay otros lugares y montañas por la zona en la que todavía se encuentran restos de este tipo. Sólo hay que buscarlos...
En el artículo de hace unos días sobre piolets, os recomendaba proteger la hoja del piolet, para no romper nada durante su transporte con el resto del material (en el maletero del coche, por ejemplo).
También os indicaba, que no era necesario comprarla, pues se podí ahacer con un trozo de manguera. Y aquí está.
Se trata de una funda "integral" para la hoja y la pala del piolet. Yo solo la uso para llevar el piolet en el coche o en el equipaje. El artefacto en cuestión es este:
Para fabricarlo, se corta el tubo a medida de tu piolet con la forma que se puede ver en la foto. Luego con otro trozo, se protege la pala (o maza). Las dos partes las podemos unir con un remache. En la Y una vista superior, donde se puede apreciar el remache que une las dos partes:
Aquí lo podemos ver instalado en el piolet:
Debido a la naturaleza del material se sujeta perfectamente en su sitio sin que haga falta ninguna goma, aunque si fuese necesario puede ponerse una goma rodeando la hoja.
Yo solo la uso para llevar el piolet en el coche o en el equipaje, ya que es cuando se corre más riesgo de romper algo. Una vez metidos en faena, podría resultar un estorbo.
Ediciones Desnivel
Jean-Christophe Lafaille fue uno de los himalayistas de todos los tiempos, desaparecido en enero del 2006 en un intento en solitario al Makalú, cuando le faltaban 3 ochomiles (Makalú, Kangchejunga y Everest) para hacer "los 14".
Siempre tuvo un estilo propio, sin oxígeno, muchas veces en solitario, abriendo vías, siempre de forma diferente a la habitual.
Como ejemplo, el GI y GII los hizo a la vez, atravesando el macizo de los Gasherbrum, como sugirió una vez el "rey" Messner.
Este libro, empieza con su retirada de la cara sur del Annapurna, en la que murió su compañero de cordada Pierre Bégin, tras lo que tardó cinco días en descender al campo base...
Y acaba 10 años después con su ascensión (al Annapurna, otra vez) por la arista este junto a Alberto Iñutarregi.
Es de lo mejor que he leído sobre himalayismo. No te cuento más. Descúbrelo tú.
Si quieres saber algo más sobre Lafaille, date una vuelta por aquí: http://www.jclafaille.com/
En el macizo de los Ubiñas, al final de la cresta que sale de Peña Ubiña hacia el norte, se encuentra el objetivo de hoy: El Prau (2.360 m).
Desde Torrebarrio (1230 m.) seguimos la pista que sube hacia los Llanos del Fontán, y al poco podremos observar toda la cresta.
A la izquierda, al final de la cresta podemos observar el Prau, con la evidente ruta de subida bien a la vista.
Una vez llegado a los llanos, debemos acercarnos a la larga pala de nieve que en dirección S-O cae desde la cumbre del Prau. Para ello, podemos seguir un rato la pista (si no está completemante oculta por la nieve), o casi mejor, ir directamente hacia la pala, buscando un camino más directo.
Como precaución, no hay que acercarse demasiado a la base de la cresta, ya que es habitual la caída de piedras
Una vez en la pala inicial, "to'rectop'arriba", no tienes pérdida.
La pala de nieve sube y sube, ganando inclinación...
... hasta que podemos apreciar la canal (que se encuentra quizás a media subida) que es el paso clave de la ascensión.
Antes de encarar la canal, viene bien una paradita...
... desde la que podemos apreciar una buena vista de Peña Ubiña.
Seguimos subiendo, y ya vemos el final de la canal.
Si la nieve está muy dura, hay que tener un poco de cuidado, pues tiene bastante inclinación. A la vez, hay que tener un ojo puesto en la pared de la derecha, por si caen piedras.
Una vez superada la canal, ya sólo queda otra pala de nieve que nos lleva directamente hacia la cumbre. Desde aquí las vistas ganan con la altura...
... y con un poco de paciencia y esfuerzo, llega la recompensa.
Desde esta cumbre tenemos una vista privilegiada de los Fontanes, y toda la cresta hacia Peña Ubiña. Y hacia el norte... mejor no te lo cuento, descúbrelo tu mismo.
Ya sólo queda bajar. Si la nieve sigue dura, habrá que tomarselo con calma y cuidado. Si hace sol, seguramente estará ya blanda, y no causara problemas.
Si esperabas un descripción superdetallada del camino a seguir, o incluso tracks para usar con tu GPS, lo siento, aquí no encontrarás lo que buscas. Creo que parte de la magia de la montaña, es descubrir tu mismo el camino. Aquí encontrarás algunas indicaciones y un par de advertencias. De todas formas, si tienes alguna duda sobre la ascensión, envíame un correo.
Saludos.
Veamos este ¿cardo?:
Afiladas púas le protegen de los depredadores animales y humanos ¿civilizados?.
¿Es la evolución le ha dotado de semejante protección (que no por ser poco sofisticada es menos efectiva)?.
¿O ha surgido por imitación....
... del alambre de espino (artificial, pero no por ello más efectivo) que surge a su lado...?
É unha broma, home.
Como toda herramienta, deben seguirse unas pautas para su conservación y uso, máxime cuando de esta herramienta puede depender tu integridad física.
Cuidados y conservación del piolet:
- No calentar nunca el acero, por ningún motivo, el tratamiento térmico resultaría dañado (destemplado) y con ello la resistencia y duración del piolet.
- Aunque un poco de óxido no debilita el acero, es mejor intentar que no se oxide. Para ello, debe limpiarse y secarse siempre después de sus uso. Nunca se debe guardar mojado. Si va a estar un tiempo sin usarse, darle una fina capa de aceite. Almacenarlo en un lugar seco.
- Debe inspeccionarse detenidamente antes (y después) de cada uso, buscando grietas o partes que se hayan podido aflojar.
- Si disponemos de un piolet modular, no estaría mal disponer de una hoja de recambio.
- Si golpeamos los crampones con el piolet, para quitar los zuecos de nieve, se estropeará la pintura del piolet. Esto no tiene influencia en su resistencia, pero sí en su aspecto.
- Si usamos el piolet en hielo, debe estar adecuadamente afilado. Para afilarlo, usar una lima fina y afilarlo despacio, para evitar que se caliente el metal. A mayor dureza del hielo, el afilado debe ser mayor, pero cuanto más afilado, más desgaste.
- Durante su transporte es aconsejable proteger las partes afiladas del piolet (hoja, pala, regatón) para evitar pinchar o romper otras piezas del equipo (textiles, sobre todo). No hace falta que te compres nada, con un trozo de manguera de jardín se pueden hacer buenas protecciones.
- El piolet SIEMPRE debe usarse con una dragonera de calidad.
- La dragonera debe estar sujeta SIEMPRE a la cabeza del piolet.
- Las que vienen con un aro de plástico alrededor del mango no valen para un uso técnico.
- Si tu piolet no tiene una dragonera en condiciones, puedes comprarte una por poco dinero. O te la puedes hacer tú con una cinta.
Seguridad y Aprendizaje:
- Antes de lanzarte a la compra de crampones o piolet, pídelos prestados o alquílalos y sobre todo APRENDE a usarlos. Busca alguien que te enseñe, o apúntate a un curso. Es un dinero bien empleado.
- La falta de conocimientos y/o de práctica con los crampones y piolet provocan muchos accidentes y si no sabes usar el piolet no te servirá de nada, si acaso para sacarte un ojo (a ti o a un compañero).
- El llevar crampones y piolet sin saber usarlos, puede llevarnos a una falsa sensación de seguridad que puede ser causa de accidentes.Las técnicas de autodetención con piolet no son innatas al ser humano. Hay que aprenderlas y practicarlas.
Veamos los usos habituales del piolet:
- Como ayuda a la progresión (piolet – bastón): Para usarlo como bastón, la cabeza del piolet debe ser cómoda para sujetarla con la mano y el mango debe ser lo suficientemente largo como para poder apoyarse sin doblarse. A menor pendiente del terreno, necesitaremos un piolet más largo.
- Como ayuda a la progresión (piolet tracción). Una buena dragonera y/o algun tipo de apoyo para la mano junto al regatón, favorecerá mucho su uso en este caso.
- Para tallar escalones: Con la popularización de los crampones, se abandonó el uso de tallar escalones. Aún así, un piolet con pala permitirá tallar una repisa o hacer una zanja para enterrar un piolet para hacer un seguro.
- Para clavar pitones o clavos. Si el piolet dispone de maza, puede usarse para poner pitones, aunque si vamos a poner muchos, será más cómodo y eficaz una herramienta más corta (un martillo de escalada, o un martillo-piolet).
- Como seguro o anclaje rápido. Un mango que penetre bien en la nieve dura (como una estaca de nieve), permitirá hacer un aseguramiento rápido mediante bota-piolet.
- Como seguro en una reunión sobre nieve (piolet en T). El mango del piolet no debe ser demasiado curvado y debe tener una buena resistencia.
- Como seguro sobre hielo. El piolet debe tener un agujero junto el regatón en donde pasar un mosquetón. Otra posibilidad es usar un agujero en la cabeza, pero si la dirección de tracción no es correcta, es más fácil que se suelte. Nunca usar la dragonera para asegurarse.
- Para parar una caída (auto detención). Un piolet muy largo (+ de 65 cm) hará mucho más difícil la maniobra.
Elección del Piolet.
A la hora de la elección deberemos tener claro para que queremos el piolet. Así según los requisitos de uso, podemos resumir lo siguiente:
- Travesías glaciares o ascensiones muy sencillas: Necesitaremos un piolet de forma clásica, mango recto, con una longitud tal que agarrado por la cabeza y con el brazo extendido nos llegue a la altura del tobillo (entre 65 y 75 cm aproximadamente). Puede ser de tipo B o T.
- Esquí de travesía: Normalmente de forma clásica y aligerados. De tipo B. Con tamaños desde los 45 a 55 cm. Los hay de menos de 300 gr. Sólo valen para autodetención y autoseguro. Suelen carecer de regatón.
- Ascensiones con pendientes moderadas (hasta 60º): Forma clásica, mango recto o mixto, preferiblemente de tipo T, de unos 55 – 60 cm.
- Ascensiones con pendientes fuertes (más de 60º): Piolet tipo T, Con cualquier forma de mango pero que permite un buen uso en piolet tracción, y a la vez que también permita cierto uso como apoyo, tamaño entre 50 -60 cm.
- Corredores, mixto y hielo no vertical: Necesitaremos una pareja de piolets de tipo T, pensados para usar en piolet tracción. Uno con pala y otro con maza (para poner pitones). Si hay que poner muchos pitones, puede venir bien una 3ª herramienta auxiliar (martillo-piolet). Es muy importante que tengan unas buenas dragoneras, de 50 -55 cm.
- Escalada en hielo: Pareja de piolets tipo T, pero las hojas puedes ser tipo B. Pueden ser aconsejables bien dragoneras que se puedan soltar fácilmente del piolet y buenos apoyos en el mango para las manos. De unos 50 cm. Una 3ª herramienta puede venir bien a la hora de poner tornillos de hielo o pitones mientras estamos asegurados de los dos piolets. El uso de pala o maza depende del entorno. Para un uso deportivo, pueden incluso eliminarse ambas, y usarlos sin dragoneras.
- Dry-tooling: Como los de hielo, pero con hojas tipo T muy resistentes. Y en ocasiones con cabezas de formas especiales que permiten gancheos inversos y otras virguerías. Los mangos pueden disponer de 2 zonas diferenciadas para ofrecer diversas formas de agarre.
Continúa (y finaliza) en: Piolets (IV): Consejos y recomendaciones
Lo primero hay que ver las partes del piolet, a saber:
* Hoja.
* Pala (o maza en algunos tipos), que juntos forman la cabeza.
* Mango.
* Regatón.
* Dragonera.
Los piolets los podemos calsificar de diferentes formas según alguna de sus características.
Según la tecnología de fabricación de la hoja y pala:
1- Mecanizado: La hoja se fabrica a partir de una lámina de acero (o aluminio), que es cortada con la forma adecuada. La pala puede hacerse por separado con el mismo método y luego soldarse a la hoja o puede formar parte de la misma pieza metálica de la hoja, consiguiéndose su orientación horizontal por medio de un torsionado de la pieza. En el caso de piolets modulares, la pala irá fijada directamente al mango.
2- Forjado: El procedimiento se basa en golpear el acero (normalmente calentado al rojo) para darle forma. A la vez, el forjado alinea las estructuras internas del acero en la misma dirección, lo que hace mucho más resistente la pieza resultante. No confundir con un simple templado de una pieza mecanizada.
El procedimiento de mecanizado es mucho más barato que el forjado, pero presenta como inconveniente que el espesor de la hoja es constante en toda su longitud y que el acero mecanizado es menos resistente que el forjado.
Según su resistencia:
1- Básicos: Normalmente denominados de "paseo" o "travesía". La cabeza del piolet puede ser de acero o Zicral (aluminio). La resistencia del piolet es de unos 250 Kgr. Están identidicados en el mango, cerca de la cabeza con una B dentro de un círculo.
2-Técnicos: La cabeza es siempre de acero. La resistencia es de unos 400 Kgr. Los técnicos se pueden usar para montar reuniones. Están identificados en el mango cerca de la cabeza con una T dentro de un círculo.
Todos los piolets llevan una T o una B según el tipo de Piolet dentro de un círculo.
Hay piolets modulares, principalmente usados para escalada en hielo, en los que su mango es de tipo “T” y las hojas pueden ser “B”. La razón de esto es que las hojas tipo “B” son más finas y penetran mejor en el hielo.
Respecto a su forma:
1- Clásico: El de toda la vida, recto, válido para un uso habitual en travesía glaciar o alpinismo. Las medidas más habituales en estos piolets es de 60 a 70 cm, aunque pueden encontrarse de hasta de 80 cm.
2- Tracción: Esos con el mango curvado y hojas con formas más agresivas, pensadas para cascadas de hielo, corredores y alpinismo de dificultad. Habitualmente de unos 50 cm de longitud. Englobamos aquí los diseñados para dry–tooling y hielo extremo aunque engan características propias.
3-Mixtos. Tienen una cabeza clásica, pero el mago un poco curvado. Permiten un uso bastante correcto en un uso normal, y permiten usarlo como piolet tracción con ciertas garantías. Suelen medir entre los 50 y 60 cm.
4- Auxiliares o 3ª herramienta, generalmente con maza en vez de pala y con mango muy corto (de unos 40 cm): También llamados martillo – piolet, usados sobre todo como herramienta auxiliar en escalada en hielo o corredores muy difíciles.
Continúa en: Piolets (III): Usos y elección del piolet
El piolet nace como una fusión entre los bastones usados por los pastores de los Alpes y de pequeñas azadas de uso agrícola.
Esta fusión, producida sobre 1840 se produce para unir en una sola herramienta las funciones de sus dos antecesores. Por una parte el apoyo del bastón (que ya disponían de una punta metálica para que duraran más) y una pequeña azada o hacha para tallar escalones en el hielo (aún no había crampones).
Con el tiempo, la forma del hacha se modificó para tallar mejor los escalones, pasando el filo del hacha de ser vertical a horizontal (la pala de hoy en día).
A mediados de los 60 se comenzaron a usar aleaciones metálicas para los mangos en vez de madera. Ala vez, se redujeron más los mangos y se empezaron a usar hojas curvadas.
A principios de los 70 aparece el concepto de “Piolet Tracción” y sobre 1975 aparecieron los piolets con hojas modulares.
A mediados de los 80 aparecen los mangos curvados… y la evolución sigue.
Hoy en día hay modelos súper especializados y adaptados a las actividades deportivas de hoy en día, como escalada en hielo, dry tooling, etc.
Continúa en: Piolets (II): Clases y formas
Para coger el piolet que llevamos en la mochila, en un portapiolet tradicional, debemos pararnos, sacarnos la mochila, coger el piolet y volver a ponernos la mochila.
Otra opción es que un compañero nos ayude.
Si no hemos sido suficientemente previsores, puede que nos hayamos adentrado en una zona de nieve dura sin el piolet en la mano, y cuando nos damos cuenta, podemos estar en una situación delicada.
Para suplir estos inconvenientes, muchas mochilas disponen de sistemas que permiten coger el piolet sin tener que quitarnos la mochila.
Si nuestra mochila no dispone de un sistema como ese, no hace falta que cambiemos de mochila, nos lo podemos hacer nosotros con un trozo de goma y un cierre tanka.
Partimos de una mochila con un portapiolet tradicional, que se basa en un bucle de cinta, (foto de la deracha).
Ahora debemos buscar un sitio con el que sujetar la hoja del piolet, en este caso hay una especie de daisy justo por encima del bucle del portapiolet, que nos vendrá muy bien.
En caso de que nustra mochila no tenga nada parecido, se puede coser un trozo de cinta en la posición adecuada.
Por último hacemos un bucle con una goma (recuperada de un chubasquero viejo) y le ponemos un tanka para que se pueda ajustar (ver foto).
Ya está listo. Ahora ponemos la hoja del Piolo a través de la cinta y sujetamos la pala (o maza) con el bucle de goma (del lado del tanka).
Ajustamos el tanka para que no se suelte y queda amarrado (ver foto inferior).
Cuando nos haga falta cogerlo, con la mano, tiramos de la goma (o del tanka), liberando la pala y ya podemos cogerlo. Sacando la hoja del piolet de la daisy, ya queda liberado, puesto que la fijación superior del portapiolet no lo sujeta hacia abajo.
Espero que os sea de utilidad.
Hasta el próximo brico, amigos.
Cuidados de los crampones:
Consejos de uso:
Espero que os haya sido de ayuda.
Normalmente, antes de elegir material, debes decidir el uso que le vas a dar. Y este caso no es diferente. Según el uso que se le vaya a dar, deberá tener unas características determinadas.
PERO, en este caso, lo que deberías haber hecho primero es elegir las botas adecuadas para tu actividad, y me explico. En realidad las únicas botas a las que se pueden poner crampones con garantías son las semirígidas y las rígidas.
Las botas de trekking flexibles en realidad no son cramponables. Es decir, como mucho, con unos crampones flexibles de correas, podrás usarlas para pasar neveros o glaciares, pero con muy poca inclinación.
Nunca, nunca, bajo ningún concepto usar crampones con fijaciones semi o auto en botas que no estén preparadas para ello.Hacer esto ha causado varios accidentes mortales en España en los últimos años.
Lo siguiente, si ya tienes tus botas (y son las adecuadas), la elección continuará con las características generales del crampón. Así según el uso que se les vaya a dar buscaremos unas u otras características.
De forma general:
Otros consejos a la hora de elegirlos:
Continúa (y finaliza) en: Crampones (IV): Cuidados y consejos de uso
Los crampones pueden clasificarse de diferentes formas según sus características:
Según su material:
Según el tipo de construcción y rigidez:
Según el número de puntas:
Según la forma de las puntas frontales:
Según el sistema de fijación:
Continúa en: Crampones (III): Elección de crampones
Henry además, junto con su hermano Arnato, también desarrollan los primeros crampones de aleación, disminuyendo el peso de semejantes trastos.
En 1967 se desarrollan los primeros crampones rígidos en USA, permitiendo lo que hoy conocemos como escalada en hielo.
En 1972 a otro alpinista norteamericano Mike Lowe se le ocurrió la idea de usar el mismo tipo de fijaciones de los esquís a unos crampones. Habían nacido las fijaciones automáticas (y semi).
Por último, en 1986 Grivel y Charlet Moser se sacan de la manga el crampón monopunta, para deleite de los escaladores de hielo más frikis (buen rollito, eh).
Continúa en: Crampones (II): tipos de crampones
Lo de siempre. Mientras en muchos lugares de Galicia crecen montañas de basura en vertederos incontrolados, y la basura que se recoge se incinera, llenando el aire de dioxinas...
Mientras, segimos echando toneladas de mierda a las rías y a los rios...
Mientras se sigue permitiendo que algunos destruyan montañas enteras para extarer pizarra, cueste lo que cueste (véase trevinca)...
Mientras seguimos quemando carbón sin parar, provocando lluvia ácida y talando bosques para poner "molinos de viento"...
Mientras se siguen haciendo autopistas, presas, vías de tren y tendidos de alta tensión sin tener encuenta el entorno (y no hablemos de los puertos)...
Mientras hordas de cazadores alcoholizados, siembran el terror en los montes todos los otoños, disparando a todo lo que se mueve (y a lo que no se mueve también)...
Mientras caravanas de quads, motos y todo-terreno inundan corredoiras y caminos...
Mientras se hacen todas estas tropelías en nombre del desarrollo, otros también hacen las suyas en nombre de la ¿conservación?, como el director del parque.
(Véase el enlace: http://www.desnivel.com/object.php?o=16086)
Como dijo el otro "manda carallo". Y digo yo, (como dijo otro también) ¿Quen carallo manda aquí?
Hay que joderse con estos ignorantes.